MI DIVORCIO
Por: Galleta
Parra.
La mayoría de los post que compartimos en redes sociales se basan primeramente en dónde estamos, qué comemos, un porcentaje alto comparte cosas que en realidad no practican, muchos otros comparten alegrías y por supuesto en un nivel mayor, sus emociones negativas en cuestiones de AMOR.
Muy pocas veces
nos damos a la tarea de compartir las decisiones difíciles, que nos ayudan a
crecer y que seguramente esto ayudaría a otras personas.
Me preguntaron
que ¿cómo estaba? y que cómo había sido el proceso de tomar la decisión de
divorciarme. Debo confesar que fue muy fácil. Pero para llegar a esto, también
debo confesar que pase por un proceso muy largo, difícil y complicado.
Fue fácil porque
comprendimos que nuestra relación no iba a ningún lado. Porque yo no compartía
sus interés y él ni remotamente los míos. El amor también se construye de
evitar sufrimientos innecesarios.
Siempre he
creído que lo más importante que tenemos las personas es el “tiempo”, es
valioso y pasa muy rápido, por ello respeto el mío y sobre todo el de los
demás, entonces cuando te levantas y te das cuenta que tu tiempo lo compartes
con alguien que es ajeno a tu tiempo, y lo niegas o lo disfrazas, inicia el
dolor… Porque lo
ocultas, se convierte en rutinaria la negación y vives en una burbuja de
mentiras, desatenciones, incomprensión, y eso hace que el amor que se sentía se
convierta en sufrimiento, incertidumbre, ansiedad y mucho estrés.
Tenemos la manía de encerrarnos en círculos viciosos, de no salirnos de los patrones establecidos, de crear un mundo paralelo en el que podemos ir con los ojos vendados.
Mi ahora
ex-esposo, es un hombre muy humano, que me regaló los placeres más maravilloso
de la vida, me llevo de la cima más grande que te brinda la felicidad, al fango
más inusual del amor.
Cometimos
errores porque nos dimos cuenta que somos seres humanos, ¡qué hermoso es
reconocerlo!
Es un hombre
bueno, que estoy convencida que la persona que decida amar (no la que ocupe mi
lugar, sino el lugar que él le quiera dar), la hará muy feliz, porque tiene
buen sentido del humor, le gusta hacer piojito, prefiere ceder ante una
situación de conflicto y lo mejor es que le encanta ayudar en las labores del
hogar. Pero tiene un requisito para quien decida acompañarlo: " debe amar
el fútbol" incluso más que a él.
Siempre pensé
que el día que dejará mi hogar, sería doloroso, muchas lágrimas, hasta pensé
que nunca iba poder, yo no sé si active todos mis mecanismos de defensa, pero
mientras la mudanza hacía lo propio, yo reía, estaba entusiasmada por el nuevo
depa, ya quería llegar a colocar la planta que había comprado, ya me veía
leyendo desde el balcón, con esa vista hermosa.
Mientras subía
la colección de mis discos que traigo cargando desde la prepa, Control Machete,
María Daniela y su Sonido Lasser, OV7 y Panteón Rococó, mi amiga lloraba, no
podía creer que con tanta serenidad estaba dejando 15 años de mi vida,
amablemente respondí: “Vale la pena decir adiós cuando sobran motivos”.
Quiso quedarse a
dormir esa noche, pero me negué rotundamente, estaba preocupada por mí, pues
desde los 8 años nunca había dormido sola, pero yo tenía tantas ganas de
hacerlo, por fin dormí 9 horas seguidas, al despertar mi cara dibujaba una
sonrisa, mire la ventana, los rayos de sol iluminaban mi nueva habitación,
desde ahí veía mi planta y la foto de mi abuela, diciéndome que todo estaba
excelente, que era momento de iniciar de nuevo.
Salí a correr y
mi mente volaba, pensando en lo que iba preparar para desayunar, por primera
vez en años, iba a cocinar algo que realmente quería degustar, soy de las
personas que no disfruta la comida en soledad, me supo a gloria, en mi nuevo
comedor, con mi nuevo plato de comida y volví a sonreír, descubrí que no estaba
sola, estaba conmigo por primera vez….¡y me asusté!
Me asusté porque
no podía entender como alguien que acaba de dejar la mitad de su vida (15 años
para ser exactos), tenía dibujada una sonrisa, entonces agradecí a Dios, al
universo, al cosmos, por conspirar a mi favor.
Ese día, todos
querían conocer mi nuevo nido (estaban preocupados) y yo solo quería estar con
la persona más importante en mi vida: “Yo”. Quería llorar, quería deprimirme,
quería gritar, enojarme, llamarle por teléfono, enviarle mensajes, y claro, publicar
en Facebook que moría de dolor, pero ¡oh sorpresa!, nada de eso pasó.
Juró que lo
intente, puse canciones de esas que te cortan las venas, luego puse “nuestras
canciones”, opte por leer sus mails, mensajes y cartas, luego saque el álbum de
fotos de la boda… ¡pero nada funcionó! reí mucho más, me llegaron anécdotas muy
buenas que había enterrado en mi memoria.
Así pasaron las
semanas y los meses, cada día más cosas buenas, así que llame a mi psicóloga,
quien éticamente me había dado de alta un año atrás, tenía miedo de sentirme
feliz, estaba acostumbrada a ser infeliz, y en ese estado estaba bien, pues
nadie nos educa para ser felices, sino para enfrentar problemas, sobre todo a
resistir, y ella dijo: “ya pasaste mucho tiempo en proceso de duelo, esto era
cuestión de valor y de tomar las riendas de tu vida, deja que cualquier
sentimiento fluya”.
Qué padre se
siente ser dueño de tu vida, de tu tiempo, hacer planes para la única persona
que de verdad debes amar: “tú mismo".
Muchas veces me
dijeron que el secreto del matrimonio es ser el apoyo del otro y creo que
tienen razón.
El otro día una
joven de 23 años que lleva viviendo con su novio 2, me dijo que ella no le
regaló nada a su pareja el día su cumpleaños, que incluso lo había olvidado,
cuestione semejante desplante y ella muy madura respondió que jamás daría más
de lo que no recibe... ¡Mira que cabrona! una niña me vino a enseñar el secreto
de la vida en pareja.
Y tiene razón ¿debemos
dar siempre nuestro 100% en todo? En la oficina veo personas que se llevan
trabajo a casa, salen muy tarde, entran muy temprano, nunca reciben un
reconocimiento de la empresa, en cuanto hay recorte de personal son los
primeros injustamente despedidos, se olvidan de vivir y de recordar el por qué
trabajan. Todo debe ser recíproco, todo. Si no es así, hay que moverlo y
cambiarlo.
Igual en las
relaciones de pareja, unas por otras, negociar siempre.
Ayudar a vencer
miedos, experimentar nuevas aventuras, ser libres en la vida, pero juntos en el
día a día, es muy sano.
Me preguntaron,
qué si quiero volver a amar, que si no estoy ciscada, que si odio a Cupido....
pero claro que muero por volver a sentir mariposas en el estómago, alegrar mis
mañanas con un hermoso mensaje, desear el fin de semana para conocer más
lugares de comida y lugares exóticos para bailar, caminar de su abrazo, si ese
brazo es atlético será mucho mejor, solo que ahora quiero caminar a su lado, no
atrás.
¿Qué si quiero
volverme a casar?, por supuesto que sí, si algo aprendí de mi matrimonio es que
soy una mujer entregada al compromiso.
Convencida estoy
que podré saber amar a alguien de manera diferente, hoy conozco mis limites, a
donde no quiero estar y definitivamente lo que busco en una pareja, que me voy
a equivocar, quizá sí, a veces con arriesgar no se pierde nada, pero perdiendo
también se gana.
.....¿Qué cuándo
llegará?, no llevo prisa, corro despacio, quizá ya toco a mi puerta y no lo vi,
quizá al terminar de escribir, inicie el primer capítulo de una nueva aventura… Estoy viva de tanto vivir y de tanto amar.
Hace días asistí
a la boda de una amiga y el sacerdote en su homilía mencionó 3 acciones que les
llevarían a una buena relación como pareja.
1.- Que su
pareja les atraiga físicamente. Están frente a mi “producidos” tú vienes con un
vestido impecablemente blanco, maquillada, peinada, muy bonita. Tú estás
vestido de traje, corbata, zapatos limpios y nuevos, veo en sus ojos que están
deslumbrados de verse tan guapos. ¿Qué va pasar mañana cuando todo esto
termine?, cuando tu esposa se despierte despeinada, chorreada de maquillaje,
con pijama vieja y sucia ¿la amarás de la misma forma?. Y tú ¿amarás cuándo se
levante con la baba en todo su cachete, cuando su cara este hinchada de
trabajar todo el día y dormir unas horas, de que prefiera usar esos jeans
viejos con tenis y playera rota para salir a desayuna? ¿Están convencidos de
amarse físicamente con y sin producción?
2.- Aquí, hablo
del valor de la Confianza. Si todo el tiempo lo miras con cara de sospecha,
olvídalo. Cuando se pierde la confianza se pierde todo, y obvio esto no sucede
de la noche a la mañana, seguramente habrán descubierto algunas mentirillas que
no tenía por qué soltarlas. O sea, no son inocentonas, tienen peso, como el
hecho de decirte que se fue a visitar a su familia, y ves a su familia en
Facebook en una fiesta infantil. No tienen por qué revisar sus teléfonos, eso
es violar la intimidad, pero si algo los lleva a realizarlo, quiere decir que
algo anda mal, la confianza se trabaja todos los días, cuando se camina por
igual, toma tiempo lograrla se forma a base de comunicación, complicidad y
autenticidad, lejos por completo de la mentira.
3.-
Reconocimiento Público. -Les cuestionó-, ¿Qué sintieron cuando caminaron juntos
hasta el altar?, tomar su hombro y que todos vean que está hermosa mujer es tu
esposa y tú, que vean lo feliz que se ve tu esposo de caminar junto a ti.
Llegar a un lugar y presentar a tu esposa con orgullo, hablar de sus logros, de
lo feliz que te hace su realización y viceversa. El reconocimiento es más
importante que el amor, es vivir en él sin decirlo.
Desde ese día
quiero ir siempre a sus misas….
Leí por ahí que
nadie se enamora por elección, sino por casualidad. Nadie se queda enamorado
por casualidad, sino porque trabaja por ello, y nadie se desenamora por
casualidad, sino por elección.
Ojalá más
hombres y mujeres tengan el valor de tomar las riendas de su vida, se siente
muy chingón saber lo que no quieres y enfrentarlo con una sonrisa.
Mi hermana envió
un post de un tal psicólogo Ramón Torres: ¿Quién dijo que volver a empezar es
fracasar?. Volver a empezar es volver a soñar, es volver a vivir. Y cuantas
veces sea necesario, usted siga insistiendo. No acepte, no permita, ni se
resigne a pasar por esta vida sin intentar ser feliz. ¡¡¡Y no se rinda!!
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